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ACUPUNTURA

La Medicina Tradicional China (MTC) nos ayuda a prevenir y corregir los desequilibrios del organismo. Comprende diferentes técnicas que se combinan entre sí para obtener los resultado deseados. Estas son: acupuntura, fitoterapia china, moxibustión y ventosas. El Qi Gong (o Chikung) y el masaje Tui Na también forman parte de la Medicina China.

La Acupuntura tiene 5000 años de historia y el respaldo de numerosas investigaciones científicas en todo el mundo. Un diagnóstico personalizado nos ayuda a encontrar la causa del malestar, y dado que cada persona es vista como un todo, conseguiremos beneficios más allá del síntoma que buscábamos paliar.

Te invito a descubrir por ti misma los resultados de la acupuntura en los desajustes del ciclo menstrual, durante la perimenopausia y menopausia, en casos de infertilidad, endometriosis, SOP…

La selección de puntos variará según las necesidades del paciente y se modificará de sesión a sesión según los avances que vayamos obteniendo. Déjate sorprender por los resultados que ofrece esta técnica milenaria.

Fitoterapia China: Se basa principalmente en plantas. Pueden envasarse como polvos, cápsulas, tabletas o decocción, dependiendo de la hierba y su uso previsto.

La fitoterapia china comparte filosofía con la acupuntura: hay que hacer un diagnóstico y preparar un tratamiento antes de recomendar una fórmula en particular (una combinación de diferentes hierbas). Las dos técnicas van de la mano. La combinación asegura una mayor eficacia.

No solo prolonga la acción terapéutica de la acupuntura, sino que llega donde en ocasiones no se llega con la acupuntura.

Moxibustión: Consiste en aplicar calor a través de una moxa, un cilindro hecho con artemisa. El Huang Di Nei Jing Ling Shu, texto médico chino, afirma que “una enfermedad que no se puede tratar con acupuntura se puede tratar con moxibustión”. 

La moxa es un emenagogo, lo que significa que puede desencadenar un aumento del flujo sanguíneo en el área pélvica, especialmente en el útero. Es por esto que a menudo se usa para tratar los cólicos uterinos y la menstruación escasa (ligera o ausente). Alivia la congestión y proporciona un efecto anestésico. Es antirreumática y diurética.

Se puede aplicar en polvo, en forma de conos, sobre jengibre, ajo o sal según el efecto que busquemos obtener.

Ventosas: también conocido como cupping por su nombre en inglés, consiste en crear succión durante unos minutos con ventosas de cristal, plástico, bambú o silicona.​

El objetivo es ayudar con el dolor, la inflamación, el flujo sanguíneo, la relajación y el bienestar.

Estas técnicas tienen que ir acompañadas de una alimentación y estilo de vida adecuadas.